Autoridades dicen que solo busca preservar suministro de agua. Grupos de derechos humanos cuestiona legalidad de la medida y temen por el desarraigo de las poblaciones indígenas.
Familias enteras huyeron de sus casas el martes luego de que la policía se congregará cerca del bosque de bosque Embobut para desalojar a miles de indígenas de los pueblos Sengwer y Cherangany que según manifestaron, amenazan el suministro local de agua.
El bosque ubicado en las colinas Cherangani, al oeste de Kenia, es el hogar de ancestral de las comunidades dedicadas a la caza y a la recolección desde hace siglos. En los últimos veinte años el área ha sido invadida por miles de persona en busca de tierras de cultivo.
Las autoridades afirman que ello ha significado la destrucción de la selva y la sequía de los ríos, que proveen de agua potable y riego a muchas ciudades y pueblos cercanos. Se estima que el bosque estaría habitado por entre 7 mil y 15 mil personas.
«Los informes que nos llegan de las comunidades indígenas hablan de una situación caótica. Las personas son amenazadas y temen por su seguridad”, señaló un vocero de la asociación Forest Peoples Programme. «Algunas familias están huyendo de sus casas por miedo a los desalojos. Alrededor de 150 policías y guardias forestales, incluyendo a 30 efectivos del escuadrón antimotines, están conduciendo los desalojos en tres localidades: Tangul, Kipsitono y Maron, cerca del bosque. Más tropas pueden unírseles.»
Al menos dos gobiernos de Kenia han amenazado a las comunidades indígenas con un posible desalojo. En los últimos dos años, muchas casas han sido quemadas en un intento de forzar a la gente fuera de la zona. En noviembre del 2013, el presidente Uhuru Kenyatta, visito este bosque y prometió fondos para el traslado de los avitantes, pero el compromiso fue luego ignorado. El plazo del gobierno para trasladar a los indígenas venció la semana pasada.
Pero más de 40 grupos de derechos humanos y ambientales a nivel internacional han cuestionado esta semana la legalidad del desalojo de los Sengwer y Cherangany y el modo como las autoridades de Kenia han intentado desplazar a poblaciones indígenas en el nombre de la conservación.
«[Este desalojo] violaría los derechos humanos de los pueblos indígenas Sengwer y Cherangany, y su derecho a la utilización sostenible y conservación de la biodiversidad en sus territorio, de ser desalojadas de sus ancestrales tierras y privados de sus propios medios de subsistencia indígena que están unidos a su vida en el bosque, identidad, sus fuentes de alimento tradicionales, agua, salud y vivienda y para su supervivencia cultural como pueblo indígenas», dijeron en una declaración conjunta.
Forest Peoples Programme agregó además que «durante muchos años el gobierno ha intentado desalojar los habitantes indígenas del bosque quemando sus hogares. Esto lo han hecho en el nombre de la ‘conservación del bosque’, mientras que pretenden remover a la población local de sus tierras. Las organizaciones ambientales reconocemos hoy que este enfoque sólo empeora la situación del medio ambiente y acarrea un desastre de derechos humanos que se suma a la crisis ambiental.»
Según el Programa de Medio Ambiente de las Naciones Unidas en Nairobi, las colinas de Cherangani se encuentran entre las cinco más importantes zonas de captación de agua de Kenia. La conservación de las zonas altas se considera vital para evitar la escasez de agua en las ciudades.
Para adherirse a la declaración envíe el nombre de su organización a Ville-Veikko Hirvelä (villeveikkoh1@gmail.com) y a Justin Kenrick (justin@forestpeoples.org). Siga el caso aquí.
Texto: The Guardian / John Vidal.
Fuentes adicionales y fotos: Forest Peoples Programme.
Foto: Justin Kenrick / Survival.
Edición y traducción al español: CHIRAPAQ.