La Organización de Jóvenes Ñuqanchik instó al gobierno regional de Ayacucho a implementar mecanismos urgentes para reducir los embarazos en adolescentes que el año pasado llegaron a más de 2 200, según informó la Dirección Regional de Salud de esta región. Esta demanda se realizó en el marco de la Semana de la Maternidad Saludable y Segura celebrada en el Perú del 14 al 20 de mayo.
“Contar con programas de educación sexual efectivos que retarden la iniciación sexual de los adolescentes contribuirá a asegurar su proyecto de vida y a establecer relaciones afectivas adecuadas en el futuro” explicó Viviana Mallqui, representante de la organización Ñuqanchik.
Mallqui señaló que el embarazo en adolescente trae consigo una serie de implicancias biológicas, como el parto prematuro y el riesgo de muerte, así como graves consecuencias psicológicas. “También existe una fuerte presión social ya que las jóvenes madres se ven obligadas a abandonar sus estudios lo cual reduce sus posibilidades de desarrollo y contribuye a la perpetuación de la pobreza”, señaló.
Además de proporcionarles la información necesaria para que los jóvenes ejerzan su sexualidad con responsabilidad, Mallqui destacó que los procesos educativos deben también apuntar al desarrollo de la autoestima, el respeto mutuo y la autonomía en la toma de decisiones. “En el caso de los jóvenes y pueblos indígenas se debe considera además nuestra identidad étnico-cultural, conocimientos tradicionales y plena participación en toda política y programa de salud”, señaló.
La Semana de la Maternidad Saludable y Segura se celebra la tercera semana de mayo desde 1998 a iniciativa del Ministerio de Salud del Perú con el fin de desarrollar actividades que generen cambios de actitud en la población y en los prestadores de salud, así como en las autoridades involucradas a favor de la salud materna y la familia.
La Organización de Jóvenes Ñuqanchik promueve la participación política de los jóvenes indígenas y su formación como líderes con una identidad cultural fortalecida. Actualmente sus miembros proceden de los barrios peri-urbanos de la ciudad de Huamanga y comunidades rurales de Ayacucho, con miras a constituirse en una red que articule a jóvenes andinos y amazónicos a nivel nacional.
Ñuqanchik en alianza con CHIRAPAQ promueve espacios donde adolescentes y jóvenes se informan y debaten sobre los temas de salud desde una visión intercultural y de nuestros propios identidades culturales, con el fin de consolidar una agenda indígena que incluya su participación activa.
EL DATO
La Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo de las Naciones Unidas, celebrada en El Cairo en 1994, reconoció explícitamente, como un derecho humano, el derecho de adolescentes y jóvenes a acceder al disfrute de una vida sexual, satisfactoria y sin riesgo, disponer de información, atención y medios para alcanzar el nivel más elevado de salud sexual y a recibir atención a sus necesidades de enseñanza y servicios de manera que puedan asumir su sexualidad de manera sana y responsable.
El Artículo 23 de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas señala que dichos pueblos tienen derecho a participar activamente en la elaboración y determinación de los programas de salud que les conciernan y, en lo posible, a administrarlos mediante sus propias instituciones.