En medio de la pandemia, los pueblos indígenas han encontrado en sus conocimientos ancestrales algunas respuestas para lidiar con el coronavirus. Tal es el caso de la comunidad de San Francisco de Raymina en Ayacucho, ubicada a más de 3750 msnm, donde Orlando Ramírez Soca, líder comunal, comparte sus conocimientos y prácticas ancestrales de la medicina tradicional indígena para aliviar las infecciones respiratorias o síntomas asociados con el coronavirus.
Orlando Ramírez precisó que en su comunidad no tienen un centro de salud y, en este tiempo de cuarentena, enfermarse era una preocupación de todos. “Durante todo este tiempo nos hemos tratado con nuestra medicina pues no tenemos un centro de salud. Además, sin personal de salud que vaya de comunidad en comunidad, sin farmacias ni economía, y con las fronteras cerradas, preferíamos quedarnos en casa para evitar contagiarnos”, comentó.
Gracias a los conocimientos ancestrales indígenas y a los sabios y sabias que practican la medicina tradicional, pueden hacerle frente a diversas enfermedades. “Nuestra medicina nos han ayudado a mantenernos sanos. Sin embargo, es importante que sepamos que nuestras plantas no sustituyen las recomendaciones para evitar el contagio del coronavirus como el lavado de manos, la cuarentena y el cuidando a nuestras personas más vulnerables: nuestros sabios y sabias”, indicó.
El líder comunal detalló que entre las plantas que usan están el matico, eucalipto, ciprés y el kion. “Con todas estas plantas preparamos infusiones y las usamos como expectorantes, para controlar la fiebre, para aliviar el dolor y otros contribuyen a fortalecer nuestro sistema de defensa, entre otros síntomas”, detalló.
Otras plantas que utilizan son la pachatara, las habas de color amarillo, las diversidades de muñas y sacha muñas, eucalipto y la mullaca que, combinados con miel y otros elementos, se utilizan como expectorantes.
Ramírez Soca aclaró que el secreto del uso de estas plantas es su uso correcto y cómo se complementan entre ellas, el horario de recojo y la identificación de la enfermedad exacta. “Nuestra medicina tradicional requiere muchos conocimientos. Tenemos que conocer las formas de uso de las plantas, sus combinaciones, temperaturas y cantidades a preparar”, explicó.