Desde su fundación, Chirapaq ha estado interesada en promover espacios de debate acerca del problema estructural de la exclusión de los pueblos indígenas en el discurso oficial y la agenda pública. Uno de los principales factores de este problema ha sido y es el racismo y la discriminación internalizados y naturalizados en las prácticas sociales cotidianas de todos los estratos sociales de nuestro país, institucionalizadas o no.
Si bien la literatura ya había reflejado esta realidad hacía tiempo, recién en los años 90, el análisis abierto y objetivo del racismo como problema social surgió en algunos estudios sociológicos. Por esos años, quienes sufríamos de manera más frontal y cotidiana esta forma de violencia estructural (principalmente indígenas y afrodescendientes) no habíamos aún formado un espacio de debate para construir propuestas y agendas de cara a un país más inclusivo y justo.
Identificamos el inicio de nuestro largo andar frente al problema del racismo y la discriminación en el año 1996, cuando la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos conformó una “Mesa de Trabajo para la no Discriminación”, en la cual Chirapaq estuvo presente.
En 1997 las lideresas del “Taller Permanente de Mujeres Indígenas y Amazónicas” comenzamos a debatir acerca del problema del racismo y la discriminación. Una de las primeras preguntas que surgieron fue ¿por qué los pueblos indígenas estamos excluidos? A partir de ella, sistematizamos las respuestas en el documento “Racismo, prejuicio y discriminación con los pueblos originarios”.
En 1999 realizamos en Lima el taller internacional “Mujeres Indígenas hacia el Nuevo Milenio”, en el que participaron lideresas indígenas del Perú y el mundo, y tuvimos la presencia de la presidenta de la Comisión de la Mujer del Congreso, Dra. Beatriz Merino. Fue ocasión para denunciar entre otras cosas, el caso del programa “La paisana Jacinta” como una muestra de racismo mediático contra la mujer andina. Este tema levantó mucha polémica en la opinión pública; personalidades y gente de a pie se pronunciaron a favor o en contra, muchos entendieron nuestra posición, pero también muchos otros vieron en ello una coacción a la libertad de expresión o una “exageración”. El programa fue retirado y repuesto sucesivas veces; en la actualidad no se transmite. Un caso similar es el del “Negro Mama” que el mismo actor interpreta en su programa cómico y que sigue apareciendo esporádicamente a pesar de las protestas de las asociaciones de afro-descendentes. Lo importante de esto es que en el proceso ha habido una mayor sensibilización acerca de un problema de violencia estructural que siendo tan explícito y evidente, ha estado invisibilizado por su “naturalización” en las relaciones sociales cotidianas de nuestro país.
Este progresivo andar arribó con propuestas más claras a las reuniones preparatorias de la “III Conferencia Mundial contra el Racismo, la Discriminación Racial, Xenofobia y otras formas conexas de Intolerancia,” (Durban, Sudáfrica, 2001). Chirapaq participó en el año 2000 en la “Conferencia Regional de las Américas” y en la “Conferencia Ciudadana”, ambas en Santiago de Chile. Estos espacios contaron con importante participación de delegados y lideresas indígenas, que sumaron para producir recomendaciones de especial importancia frente al problema del racismo.
En marzo de 2001 nos reunimos con las hermanas del TPMIAAP en la ciudad de Lima y elaboramos un documento conjunto dirigido al Estado peruano, como aporte a la formulación del “Plan de Acción de la Conferencia Mundial contra el Racismo”.
El siguiente paso cualitativo fue la conformación de una “Comisión Nacional Interétnica del Perú”, integrada por la “Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana – AIDESEP”, el “Centro de Desarrollo Étnico – CEDET” la “Coordinadora Nacional de Desplazados y Comunidades en Reconstrucción del Perú- CONDECOREP”, y “Chirapaq, Centro de Culturas Indígenas”. Esta alianza de indígenas y afro descendientes permitió trabajar un plan de actividades que van desde la sensibilización en la comunidad, pasan por foros públicos con autoridades, y llegan a la conformación de núcleos de trabajo para monitorear los avances en la implementación de actividades y recomendaciones hechas por los organismos internacionales como el “Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial”, entre otros. Como miembro de la “Comisión Nacional Interétnica” Chirapaq participó en la Conferencia de Durban; en el Foro de ONGs desde la carpa de Pueblos Indígenas, expuso sobre la situación del racismo y la discriminación que afecta a las mujeres indígenas.
La plataforma permanente del “Plan de Acción de Durban” fue difundida y discutida a nivel de las organizaciones integrantes de la “Comisión Nacional Interétnica”. También fortaleció el trabajo del “Enlace Continental de Mujeres Indígenas”, pues Chirapaq, como organizadora del “IV Encuentro Continental de Mujeres Indígenas de las Américas”, (Lima, 2004), incluyó el tema del racismo y la discriminación racial como una de las mesas de trabajo. La vigencia de las recomendaciones planteadas en esa ocasión, ha sido corroborada en la Reunión Preparatoria para el VI Encuentro Continental y se espera que así sea en el “VI Encuentro Continental de Mujeres Indígenas de la Américas” (México, marzo de 2011).